Sensibio limpia e hidrata pieles sensibles

Nuestra piel es el órgano más expuesto y grande del cuerpo, así como también nuestra principal barrera protectora contra los diversos ataques que debemos enfrentar todos los días. Es un ecosistema permeable y dinámico que debemos respetar y cuidar, por lo que su estructura fisiológica es, por lo tanto, esencial.

Como muchos otros órganos en nuestro cuerpo, la piel sigue un reloj biológico interno que tiene su propio ritmo; de día, la piel desempeña un papel proactivo como barrera contra las agresiones externas, y de noche, la piel se desintoxica y se regenera.

Para preservar eficientemente la película hidrolipídica (que funciona como barrera natural de la piel) de una manera que respete su propia biología, es necesario protegerla de las agresiones externas. Algunas de las más comunes son las siguientes:

# 1: Maquillaje

La acumulación de cosméticos puede tener efectos nocivos sobre la piel de la cara. Cuando no se retira el producto a profundidad, los poros se obstruyen y no pueden respirar correctamente.

Si no se quita con cuidado, el maquillaje puede convertirse en un contaminante muy poderoso, incluso llegando a contribuir al envejecimiento de la piel y a su irritación.

Por otro lado, no todas las aguas micelares o desmaquillantes tienen las mismas propiedades, y las pieles sensibles, que tienen una barrera más frágil, se pueden irritar más fácilmente, por lo que un limpiador eficaz debe, ante todo, respetar el equilibrio dermatológico, su flora y barrera protectora. Un artículo así nos guiará en cuanto a cómo cuidar la piel.

Un producto Bioderma que cumple con estas características tolerantes con la piel, es el agua micelar Sensibio H2O, la cual respeta el equilibrio fisiológico mientras limpia profunda y suavemente. Este producto es capaz de eliminar el 99% del maquillaje del rostro, ofreciendo una excelente tolerancia.

#2: Contaminación

Este factor es, actualmente, el principal enemigo invisible de la piel, ya que tiene un impacto directo sobre ella: polvo, humo de cigarrillo, gases de escape, partículas finas y ultrafinas, ozono, compuestos orgánicos y monóxido de carbono… Todos estos elementos tóxicos bombardean la piel día y noche.

Incluso si nuestra vida cotidiana transcurre principalmente en interiores, es casi imposible reducir nuestra exposición a los contaminantes presentes en el interior de los edificios, como lo son los muebles, electrónica, sistemas de calefacción, aire acondicionado, etc. Esto, sin duda, debe tenerse en cuenta a la hora de intentar proteger nuestra vulnerable piel.

Con la contaminación presente en nuestro entorno, debemos estar siempre un paso adelante, usando productos como el agua micelar Sensibio H2O, que elimina el 98% de las partículas finas de la superficie de la piel.

La contaminación es un factor que también puede deshidratar terriblemente, por lo que es recomendable que, después de haberla limpiado a profundidad con agua micelar, gel limpiador facial o un jabon facial, te apliques un par de veces a la semana mascarillas para hidratar la cara, de acuerdo a tu tipo de piel. Si sigues este consejo, podrás prevenir la sequedad en la piel y lucir una cara sana y fresca.

# 3 Metales pesados:

Al igual que la contaminación, los metales pesados y las partículas nocivas que los componen pueden alterar el correcto funcionamiento de la piel. Su acumulación microscópica perturba la flora natural epidérmica y, finalmente, la destruye.

Los metales y minerales presentes en el agua pueden ser una fuente adicional de inflamación e irritación de la piel, por lo que es importante deshacerse de ellos mediante una limpieza regular.

El agua micelar Sensibio H2O limpia el 78% de las partículas residuales de metales pesados derivados de la contaminación urbana.

# 4 Polen

A este elemento de la naturaleza le debemos la vida sobre la Tierra, pero también es un gran detonante de alergias e irritación en la piel humana. Del 10 al 30% de la población mundial sufre alguna alergia relacionada a él. Estas alergias, además de los síntomas oftalmológicos o respiratorios, también pueden desencadenar reacciones cutáneas.

Los granos de polen, por su tamaño, no tienen la capacidad de penetrar la piel. Sin embargo, algunos elementos más pequeños que componen el grano de polen, especialmente las moléculas alergénicas (proteínas, glicoproteínas y proteasas), sí.

Con la gama de productos Bioderma de Sensibio, puedes calmar tu piel y eliminar el 99% del total de partículas de polen acumuladas.